Bagdad, 15 abr (PL) Más de 160 muertos y heridos fue hoy el resultado de una jornada de suma violencia en Iraq, donde ni los invasores estadounidenses ni las tropas nacionales logran imponerse a la resistencia.
En esta ocasión el país sufrió en Baquba, al este de Bagdad, el atentado más mortífero de los últimos seis meses. La policía informó que la explosión de un coche bomba cerca del Tribunal y el Ayuntamiento de esa urbe, capital de la provincia de Diyala, causó 40 muertos, heridas a otras 80 personas y graves daños materiales. Reportes médicos confirmaron el número de occisos, pero consideraron que esa cifra y la de lesionados aumentarían.
También dos personas murieron e igual número sufrieron heridas por el estallido de una carga en las cercanías de una estación de la policía en el centro de Bagdad. La explosión ocurrió en los alrededores de la comisaría de Alwiya y entre los lesionados hay un oficial de mediano rango. Esa detonación dañó a varios vehículos que se encontraban en la zona.
En esta jornada también perecieron 14 personas y 15 sufrieron lesiones al oeste de Ramadi, la capital provincial de Al Anbar, por la explosión de un coche bomba que un chofer suicida empotró contra un restaurante frecuentado por agentes de policía en la zona de Jamsa Kilo. Otras fuentes, sin embargo, no hicieron referencia a un carro con explosivos, sino a un individuo que portaba un cinturón con carga que hizo explotar en el inmueble.
En la capital, el estallido de un coche bomba en la céntrica plaza de Waziq causó un muerto y nueve lesionado, la mayoría agentes. Según resultados preliminares de investigaciones sobre el hecho, el vehículo estalló al paso de un carro en el que viajaba un oficial de policía, conocido como Ali Sabri, quien escapó ileso del atentado.